martes, 4 de mayo de 2021

 Boletín desinformativo de la mañana, año IX, número 1849

 


Con lo dispersa que parece y lo ordenada que es...

 

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Amanece que no es poco:

"Quiero independizarme de Madrid."

El III Barón d'Holbach (Textos escogidos)

 

Bellas tradiciones españolas: No votar porque no eres de Madrid.

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Ayer Isabel Díaz Ayuso no formuló ninguna ayusada, por impedirlo la Jornada de Reflexión.

 

Ayer Rocío Monasterio no profirió ninguna ultraextremosidad, por impedirlo la Jornada de Reflexión.

 

Ayer Edmundo Bal no suplicó ningún hazmecasito, por impedirlo la Jornada de Reflexión.

 

Ayer Mónica García no puso en solfa la gestión sanitaria del PP en la Comunidad de Madrid, por impedirlo la Jornada de Reflexión.

 

Ayer Pablo Iglesias no denunció la amenaza del fascismo, por impedirlo la Jornada de Reflexión.

 

Ayer Ángel Gabilondo no dijo nada particularmente interesante..., porque no es su estilo. Bueno, y por impedirlo la Jornada de Reflexión. Y tal.

 

Pregunta para seguidores de IV Milenio: Si Ciudadanos queda fuera de la Asamblea de Madrid, ¿habrá llegado el Fin de Edmundo?

 

Pues nada, en un rato comienzan las elecciones de las que lleva un mes hablando apasionadamente toda España y en las que no podrán votar unos cuarenta millones de españoles.

 

Ferreras ya está en La Sexta con el pijama, el pactómetro, el cepillo de dientes...

 

La ultracandidata de extremo centro, Rocío Monasterio, estuvo ayer paseando al perro. Un pastor alemán (se ve que le faltó desmelenarse del todo para agenciarse un dóberman), que no tenía el menor interés en ser paseado.

 

Sí, lo sé, como comentario político queda un tanto pobre. Pero la foto de una señora de ultraderecha sujentando a duras penas al pastor alemán..., qué puedo decirles..., resultaba..., inquietante..., y esperemos que no llegue a premonitoria.

 

Se alcanza en mayo la cifra de cinco millones de españoles vacunados con las dos dosis. Les contaría las reacciones de los que se pasaron días y días diciendo desde los medios de comunicación que eso era absolutamente imposible, pero es que están muy ocupados con la cosa esa de las elecciones y no han tenido tiempo para rectificar.

 

Que yo esas críticas de las derechas no las he entendido desde el minuto uno: es evidente que la sanidad pública española se basta y se sobra para una campaña de vacunación..., y que si no se llega, será porque las empresas privadas que tanto elogian las derechas, no cumplan los contratos suscritos con la Unión Europea.

 

Que es lo que hicieron, no entregar suficientes vacunas porque se las estaban vendiendo más caras a otros países...

 

Qué bonito es el Mercado hasta que tardan varios meses en vacunar a tu abuelo porque los laboratorios tienen que especular un rato.

 

El periodista deportivo Pedrerol cuestiona el voto por correo..., porque aún no se ha enterado de que ese ridículo ya lo hizo el otro día el ultra Abascal.

 

Esto de decir los mismos dislates que Trump, ¿será casual o tendrá alguna finalidad? Misterios de la Ciencia Política.

 

Bill y Melinda Gates anuncian una suspensión temporal del 5G.

 

Vamos, que al parecer se divorcian. A buenas horas entrevistó Évole a Bosé. Ahora, ahora sí que hay barrillo...

 

Vamos, digo yo que les voy a contar una anécdota sobre la manifestación del otro día, la del 1 de Mayo. Es sabido que a ella concurrieron los líderes de los tres principales partidos de la izquierda en Madrid, a saber: el señor Gabilondo, del PSOE, la doctora García, de Más Madrid y, por Unidas PODEMOS, su líder Pablo Iglesias. La presencia de cualquiera de ellos, cómo no, hubiera desatado críticas en los sectores conservadores, pero como acudieron los tres, los reproches se multiplicaron exponencialmente. Dejo a un lado la cuestión de poner de vuelta y media una manifestación que conmemora, entre otras cosas, la consecución de la jornada laboral de ocho horas..., y más cuando las críticas provienen de trabajadores por cuenta ajena que arrojan piedras a su propio tejado votando a los partidos de las patronales. He dicho que iba de una anécdota sin más y, sin más, una anécdota les voy a contar. El señor Cantó, actor y candidato fallido por el PP, tras su abandono consecutivo de Ciudadanos y UPyD, ha afirmado que votar a cualquiera de ellos, equivale a votar un gobierno de los tres partidos por los que se presentan. Ciertamente, es así; al menos, en principio, las tres izquierdas tienen previsto pactar si las cifras se lo permiten. Entonces, entra en acción la también actriz, aunque no candidata, Anabel Alonso, y le comenta: "Bueno, Toni, tú también eres un 3 en 1", en alusión a los tres carnés políticos que han pasado por sus manos. Pues esa es la anécdota, que Toni Cantó ha dicho algo muy obvio, como que las izquierdas, si pueden, pactarán; que Anabel Alonso le ha dicho algo muy obvio, como que ya le vale a Cantó ir diciendo obviedades políticas a un coleccionista de partidos; pero se ha quedado en el aire un dato clave: que las tres izquierdas juntas, no tienen nada en común con la previsible unión de los "populares" y los nuevos fascistas, una unión que podría alentar la xenofobia, la homofobia, los derechos de los trabajadores en general y los de las mujeres en particular. Sonriamos con Anabel Alonso y el no candidato Cantó y mañana veremos si se abre camino a la democracia por la izquierda o al fascismo por la derecha.

 

Las desinformaciones de hoy han sido desfiguradas a partir de Radio Nacional de España, Cadena SER, Público, El Diario y el Huffington Post.

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