Boletín desinformativo de la mañana, año IX, número 1856

 

Y hoy en Ciencia Política Para Todos...

 

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Amanece que no es poco:

"Hacer como que la vida es maravillosa es literatura. Luego está la política."

El III Barón d'Holbach (Textos escogidos)

 

Bellas tradiciones españolas: Montar bronca en el Congreso, no sea que veamos la que algunos tienen liada en los tribunales.

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Vuelve el Dúo Pimpinela. Sí, sí, y a todos los niveles, central, autonómico, local...

 

Sánchez y Casado se enredan en un intercambio de chorradas que pretenden ser agudezas. Como Cánovas y Sagasta, pero con la oratoria de un patio de colegio.

 

Y lo mismo sucede con Almeida y la Delegada del Gobierno en Madrid. El "popular", en un alarde de personalidad múltiple, habla como alcalde, como recadero de Ayuso, como portavoz del PP y sólo le faltó imitar al Monstruo de las Galletas... La Delegada del Gobierno hizo un Umbral y habló de su libro.

 

Rifirrafes como este llevan a que la ciudadanía saque de los debates políticos lo que sacó el sordo del sermón. Pero, oigan, que audiencia nunca les falta.

 

Y luego en la calle oyes "argumentaciones" similares y ves que no sólo se contagian los virus, sino también la incapacidad para razonar mediante sujeto, verbo y predicado.

 

Al final no te termina de quedar claro quién es reflejo de quién, la clase política de la sociedad, o la sociedad de la clase política. En cualquier caso, reflejo esperpéntico como el de los espejos de aquel callejón del Gato, de Valle Inclán.

 

Según la Fiscalía Anticorrupción, el señor Rato podría haber ocultado setenta y siete millones de euros en una sociedad "offshore" de Luxemburgo. Mira que si era para no hablar de esto por lo que Almeida y Casado se levantaron tan peleones ayer...

 

Porque le caso es que de ese caso apenas se ha hablado...

 

Milagros económicos decían que hacía rato..., maravillas defraudatorias más bien...

 

Claro, luego llega el "popular" García Egea a montarle un numerito parecido a la ministra Yolanda Díaz y ésta, en vez de cantarle "olvida mi nombre, mi cara, mi casa y pega la vuelta", va, le canta las cuarenta recordándole los desahucios, los recortes, los despidos propiciados durante el gobierno de Rajoy. Y no vean cara que se le quedó.

 

Porque era un poema.

 

Un debate político con datos, me parece más razonable que un debate de descalificaciones, pero oigan, cada uno a lo suyo.

 

A fecha de hoy, el número de comunidades autónomas que han solicitado al Gobierno la imposición del estado de alarma en su territorio asciende ya a..., un momento que las están contando..., ¡cero!

 

¿Tantas...?

 

Ya sabrán que el PP ha criticado con fuerza el proyecto de implantar peajes en las autovías a razón de un céntimo por kilómetro..., pues parece que, según la prensa, los "populares" se disponían a cobrar seis justo antes de caer el gobierno de Rajoy...

 

Por tanto, el PP ataca el mismo peaje que pretendía imponer..., no parece muy coherente..., ni por el PP, ni por el PSOE que quiere hacer cosas como las que quería hacer el PP...

 

Ah, y Pablo Iglesias se ha cortado la coleta, literalmente.

 

Ha hecho algo tan taurino que, a partir de ahora, los toreros cuando se jubilen de torturar animales, tendrán que buscarse otro ritual, no les vayan a llamar bolivarianos o algo sus seguidores.

 

Tras el imposible de que Iglesias se cortase la coleta, queda que Ayuso diga o haga algo coherente, que Casado se saque un máster y que Abascal se busque un trabajo.

 

Última hora desde Cataluña: es jueves.

 

Vamos, digo yo que la política necesita vistosidad. Por muy avanzada que sea, o crea ser, una sociedad, la política necesita compaginar gestión y espectáculo. De lo contrario, pierde interés. Y eso es malo siempre. Porque la ciudadanía que se desinteresa de los asuntos públicos, se entrega más temprano que tarde al abuso de los poderosos. De ahí que los líderes busquen dar vistosidad a sus logros y propuestas. Por eso se producen encendidos debates, por eso se anuncian medidas sorpresa, por eso se producen golpes de efecto..., por eso en España se comportan, cada dos por tres, como si fuesen críos discutiendo en el patio del colegio. Hay que entender que Casado se siente poderoso porque a Díaz Ayuso le ha salido muy bien la jugada demagógica; hay que comprender que para Pedro Sánchez, fuera de él, todo es error y confusión; hay que entender que ambos consideran que a los españoles nos encanta el infantilismo político... En esto último, tendrán razón o no, pero lo cultivan con gran dedicación. Es buena la confrontación, es positivo el colorismo en la divergencia pero..., reducir la gestión de un país a un intercambio de chorradas..., que si eres un pato cojo, que si se te pone cara de Albert Rivera, que si pues mira que tú... De verdad, ¿esto es lo que verdaderamente piensan de nosotros? Entonces, tengan ustedes claro que poco podemos esperar de ellos. Panem et circenses..., pan y toros..., cerveza y vacuidad..., no sé si estamos tomando el camino equivocado, visto lo visto.

 

Las desinformaciones de hoy han sido desfiguradas a partir de Radio Nacional de España, Cadena SER, Público, El Diario y el Huffington Post.