Boletín Desinformativo de la Mañana, año XI, número 2580

 

Marine Le Pen iba a ser implacable con Puigdemont..., hasta que los franceses han sido implacables con Marine Le Pen.

 

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Amanece que no es poco:

 

" En breve, según escribo esto, unos correrán por gusto, otros no sabrán por qué, y, otros, por la prisa de atender a los heridos."

 

El III Barón d'Holbach (Textos retorcidos)

 

Bellas tradiciones españolas: "aprender de los franceses."

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Pobre juez García Castellón, debe llevar un disgusto el hombre...

 

Alegría porque el fascismo ha ganado, pero se ha quedado corto. Es la historia de la vida de cualquier rojo en España, en Francia...

 

Un cántico nazi acallado por la gente que canta La Marsellesa. Como en Casablanca, pero de verdad. Si es que estas situaciones habría que dejárselas al cine, pero claro, nunca faltan irresponsables votando irresponsabilidades.

 

Orgullo LGTBI+ en España, Orgullo antifascista en las urnas Francesas. Y es que el orgullo, digan lo que digan, no siempre es pecado, sino que puede ser virtud.

 

Esos abogados tan cristianos recurriendo al Tribunal Constitucional el fracaso del fascismo en Francia...

 

Abascal gira hacia el ultra húngaro Orbán y se aparta de la ultra francesa Le Pen. Bueno, entre que España es el país del sol y Vox es el partido del sol..., que más calienta...

 

Y todo eso un par de días después del éxito laborista británico y el descalabro conservador. Esperanzador, sin duda.

 

Feijóo califica a Francia como motor democrático de la Unión, pide que centro y moderación se unan para impedir que los extremistas dirijan el futuro..., y ya si eso sigue pactando con los ultras en cinco comunidades autónomas.

 

La moderación bien entendida del PP es lo que tiene..., unas patitas muy cortitas.

 

En Francia la derecha no quiere saber nada de la ultraderecha. Esa es la diferencia entre el conservadurismo francés y el español.

 

A todo esto, tuiteros "demócratas-de-centro-moderado" pidiendo hundir pateras en cinco..., cuatro..., tres...

 

Cuñados ignorantes de que para deportar a un extranjero hace falta que su país lo reconozca como nacional suyo y acepte su regreso, entusiasmados con el primer bocachancla que les promete deportaciones masivas. Es el nivel.

 

El juez Peinado olvidó comunicar a Begoña Gómez la ampliación de la querella. Ay, estos olvidos que duplican "paseíllos", estos olvidos...

 

¿Cómo?, ¿que por qué no pongo comillas también en olvidos...?, bueno, humorista aficionado prevenido vale por dos. O algo así decía el refranero.

 

El Registro de la Propiedad admite haber atribuido, por "error grave", cuatro propiedades al juez Peinado. Y aquí las comillas son por citar el titular de la noticia, que conste, ¿eh?

 

Vamos, digo yo que ante fracaso electoral (aunque con muchísimo respaldo), de la ultraderecha en Francia, se impone un análisis pormenorizado de la situación. La primera consecuencia, sin duda, será que por vez primera van a saber los franceses lo que es que venga a cenar en Nochebuena su cuñado el fascista. Que en eso, España lleva décadas de ventaja, pero en Francia, ante la novedad, puede que haya hostias como panes en más de un domicilio. La segunda, es que la izquierda sólo puede ganar cuando a sus votantes les da la ventolera de ir a votar, cosa que sólo sucede cuando se le ven muy de cerca las orejas al lobo reaccionario. En Francia, las izquierdas, pararon ayer al fascismo, en España, las izquierdas son más de quedarse en casa a verlas venir. Esperemos que cuando el rojerío se movilice electoralmente aquí no sea tarde..., ya saben, el tópico ese de que los sureños tendemos a la pereza, es un tópico, pero da un mal rollo... Ahora toca que mueva ficha el señor Macron. Si fuese Feijóo, haría todo lo posible por apoyarse en los ultras. Ahí están un buen número de ayuntamientos y comunidades autónomas para demostrarlo. En Francia es posible un gobierno à la gauche, esperemos que sea así y que, si se alcanza, la izquierda se dedique a gobernar en pos del bien común y no a autodestruirse como en España. Disfruten ustedes de un lunes de libertad, igualdad, fraternidad y antifascismo. No pasa muy a menudo últimamente.

 

Las desinformaciones de hoy han sido desfiguradas a partir de Radio Nacional de España, Cadena SER, Público, El Diario y El Huffington Post.