miércoles, 8 de septiembre de 2021

 Boletín desinformativo de una mañana de verano, año IX, número 1933

 


Vamos, que la violencia está mal venga de donde venga, salvo si viene de donde conviene, que entonces ya es cuestión de matizar y eso...

 

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Amanece que no es poco:

"No les preocupa a muchos, porque esas son cosas que sólo les pasan a los homosexuales. Como cuando primero fueron a los comunistas, pero no se preocuparon los que no eran comunistas."

El III Barón d'Holbach (Textos retorcidos)

 

Bellas tradiciones españolas: Tirar la piedra y esconder el partido, perdón, la mano.

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De parte del ultra Ortega Smith, que la violencia no tiene género, pero sí tienen nacionalidad. Xenofobia exprés...

 

Efectivamente, cuando cualquier tipo de acto violento llega a los medios de comunicación, lo primero que se observa en los comentarios de Twitter, es que un buen número de mensajes de ultraderecha intentan relacionar a toda costa violencia con inmigración. Y como el culpable del hecho sea español, entonces no vean ustedes cómo decrece su interés.

 

Y es que para la ultraderecha, no es que la violencia no tenga género pero sí nacionalidad, no, para la derecha lo que tiene la violencia es rentabilidad política y se la extraen con tanto cinismo como falta de escrúpulos.

 

Por supuesto, en el PP no les gusta la violencia, pero como tampoco les gusta enfadar a los que les sostienen al frente de varios ayuntamientos y comunidades autónomas, mandan a Almeida a templar gaitas. Muy sutil todo.

 

Y, mientras, en Vox, siguen señalando de manera más o menos disimulada a feministas, inmigrantes, gays..., pero que nadie establezca un nexo de unión entre señalamientos y agresiones, que se pueden ofender y son gente muy sensible.

 

Multas de hasta cien mil euros a Iberdrola y Naturgy en Galicia por vaciar embalses, y las sancionadas no saben si pagar normalmente o dejar propina.

 

Eso que va Jesucristo a caminar sobre las aguas y no puede obrar el prodigio porque le han dejado el embalse hecho un fangal...

 

Carlos Lesmes gana ciento cuarenta y dos mil euros, por lo que duda entre seguir al frente del Poder Judicial o no presentar la dimisión.

 

Un semanario conservador alemán elogia la política de vacunación en España. Lo que llevo diciéndoles estos últimos días, que Casado no gana para disgustos.

 

Trabajadores del servicio madrileño de asesoramiento a emprendedores -entregado a una contrata, por supuesto-, no han cobrado ni en julio ni en agosto, pero pueden salir de cañas con toda libertad y sin riesgo de cruzarse en la calle con sus posibles ex-parejas. Si es que son ganas de quejarse, joer...

 

Salvador Sostres piensa que el obispo de Solsona, que ha colgado la sotana por una psicóloga autora de novelas erótico-satánicas, podría estar poseído por el demonio. Hombre, como primer capítulo para un culebrón, no digo yo que no pueda valer, pero que en 2021 un periódico y un periodista pretendidamente serios puedan hacerse eco de tamaña sandez...

 

Ya ves tú, si se enamora un obispo es cosa del diablo, pero si un obispo abusa de menores, entonces es cosa de mirar para otro lado.

 

Vale que ahora la Iglesia está empezando a reaccionar contra los abusos, pero digo yo que mucho más "satánico" debería ser abusar que enamorarse, y ya ven ustedes lo que realmente les preocupa en la Iglesia...

 

La canción "Lo que necesitas es amor" de los Beatles, pasa a titularse "Lo que necesitas es un súcubo".

 

Vamos, digo yo que las multas a las empresas eléctricas por vaciar embalses para incrementar sus beneficios, han resultado ser irrisorias en comparación con su volumen económico. Entre veinticinco mil y cien mil euros ha impuesto la Xunta de Galicia a Naturgy e Iberdrola por vaciar cuatro embalses. Se trata de cantidades muy importantes para una persona o empresa de tamaño mediano, pero insignificantes para entidades tan potentes como esas. Ciertamente, las multas siguen un principio de legalidad y no se puede sancionar con otras cantidades que las previstas en la normativa vigente. Pero no es menos cierto que dichas cantidades son adecuadas sólo hasta cierto punto, porque cuando se aplican a grandes empresas, sucede que puede llegar a interesarles más pagar la sanción que no infringir la ley. Las Administraciones Públicas que crujen a un ciudadano por pequeñas cosas, han de estar en condiciones de disuadir a una gran empresa de desobedecer las normas. Con multas mayores o con otros medios, siempre que se adecúen a la situación que se pretenda corregir. Aunque difícilmente se conseguirá algo en esa línea cuando los consejos de administración de esas grandes infractoras, funcionan como cementerio de elefantes para las viejas glorias de la política española.

 

Las desinformaciones de hoy han sido desfiguradas a partir de Radio Nacional de España, Cadena SER, Público, El Diario y El Huffington Post. 

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