viernes, 17 de septiembre de 2021

 Boletín desinformativo de una mañana de verano, año IX, número 1940

 


De parte de Javier Maroto (PP), que para bajar el recibo de la luz, Sánchez tiene que cerrar ministerios, porque por el mar corren las liebres, por el monte las sardinas, tralará.

 

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Amanece que no es poco:

El partido que saqueó España, acusa al Gobierno de expropiación.

El III Barón d'Holbach (Textos escogidos)

 

Bellas tradiciones españolas: Decir la primera jautada que se te ocurra, sabiendo que te van a votar igual. Maravillas del conservadurismo español.

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La fórmula del Partido Popular para no reducir el precio de la luz pasa por decir tal cantidad de sandeces, que no se hable más que de eso y ya no importe tanto el recibo.

 

Perdón, un lapsus, quería decir reducir a secas, sin el no delante. O eso dicen ellos y por eso lo digo yo, o yo qué sé ya.

 

Bueno, no sólo dijo Maroto lo de cerrar ministerios. También habló de una compleja operación consistente, 1, en bajar los impuestos, 2, reducir los costes de las empresas cargando todos los elementos del recibo que no son la luz a los Presupuestos Generales del Estado y, 3, asumir ese coste extra a base de impuestos. Un salto, dos palmadas y volvemos a empezar.

 

Efectivamente, dice el PP que hay que bajar los impuestos para acabar pagando los costes de las empresas privadas con los impuestos. Y para semejante jartá de millones que quiere regalar a los empresarios, basta con que Sánchez cese a dos o tres ministros y tal y cual...

 

Que lo admirable no es que profieran tamañas majaderías, no, lo admirable es que lo hagan sin descojonarse de risa.

 

La "popular" Díaz Ayuso amaga alinearse con Vox contra las normas que protegen al colectivo LGTBI, pero no es por maldad ni nada de eso, ¿eh?, es que, no contenta con que a Madrid le quepa dentro toda España, quiere que además le quepa toda Hungría.

 

Y quien dice Hungría, dice Polonia.

 

Además ha afirmado que la homofobia no existe en Madrid y que está sólo en la cabeza de las izquierdas. Ya..., en la cabeza de las izquierdas y en la cabeza de los gais que se llevan un puñetazo en el ojo, supongo...

 

Sólo porque El Diario denuncia que desde el entorno de Vox se difunden numerosos bulos sobre marroquíes que agreden a la gente, ya va por ahí la ultraderecha quejándose porque El Diario denuncia que desde el entorno de Vox se difunden numerosos bulos sobre marroquíes que agreden a la gente.

 

La ultra Rocío Monasterio va a la tele y afirma que en La Rioja un candidato de Vox se declaró mujer para cerrar una lista cremallera del partido. Y claro, como era mentira, decidió que lo mejor era seguir dando vueltas a la gansada, añadiendo que también se lo plantearon para Madrid. Y esto, la gente..., lo vota.

 

Que es como para plantearse qué les pasa por la cabeza a la gente que, tras oírles mentir, les vota...

 

El ex-músico de Mecano, Nacho Cano, ha obtenido permiso para levantar en Hortaleza una pirámide azteca de treinta metros, que contendrá un teatro (y un aparcamiento...), para una obra sobre Hernán Cortés y que será demolida al cabo de cuatro años. El aparcamiento, ya veremos. Ya saben, lo que les digo siempre: "meritocracia".

 

El salario mínimo se incrementará en quince euros por iniciativa de PODEMOS en el ámbito del Gobierno de coalición, con gran disgusto de los empresarios que han salvados sus negocios, gracias a los ERTE's puestos en marcha por iniciativa de PODEMOS en el ámbito del Gobierno de coalición. Pues eso.

 

El fin de semana no hay Boletín Desinformativo de la Mañana. Próximo número el lunes 20 de septiembre de 2021.

 

Vamos, digo yo que las derechas andan revueltas contra las medidas del Gobierno para reducir los beneficios extraordinarios de las empresas de electricidad. Las mismas derechas que metieron salvajemente las tijeras en las cuentas públicas (sin contar algunas personas de las derechas que, ya puestos, metieron también las manos), se muestras escandalizadas ante la posibilidad de moderar los beneficios que se producen más allá de los beneficios en ese sector privado. Diríanse defensoras de una especie de ley del embudo en la que lo ancho es para los empresarios y accionistas, pero lo estrecho para las Administraciones Públicas y los usuarios de cuanto el esfuerzo común puede dar de sí. Son unas derechas constitucionalistas, autoproclamadas, que ven en el texto de 1978 el norte y guía de España. Pueden ustedes preguntarles, que se saben al dedillo pasajes enteros, como si fuesen opositores a judicatura o notarías. La patria común indivisible, la monarquía parlamentaria, las fuerzas armadas como garantes de la integridad territorial, el ancho de las franjas de la bandera..., pregúntenles y les recitan el tenor literal de la carta magna. Eso sí no les hablen de la riqueza nacional al servicio de las necesidades de la gente, porque eso ya no les suena a Constitución sino a herejía. Efectivamente, las normas les resultan sacrosantas en unos temas y absolutamente prescindibles en otros. Hay un artículo que nunca les oirán mencionar ustedes a los conservadores de nuestro país, el número ciento veintiocho. Dice que toda la riqueza del país, sea la que sea y la tenga quien la tenga, está subordinada al interés general, que el sector público puede tomar parte en la actividad económica y que incluso se puede llegar a intervenir empresas cuando sea necesario. Y ya ven ustedes, el mismos texto constitucional que dicen amar, conocer, honrar y defender, contiene preceptos de los que no quieren oír ni hablar. Qué cosas tan curiosas tiene su peculiar patriotismo constitucional. O que intereses tan concretos defienden e ignoran a conveniencia, con ese peculiar patriotismo constitucional.

 

Las desinformaciones de hoy han sido desfiguradas a partir de Radio Nacional de España, Cadena SER, Público, El Diario y El Huffington Post. 

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