jueves, 18 de noviembre de 2021

 Boletín desinformativo de una mañana de otoño, año IX, número 1980

 

Vox plantea al Gobierno mil preguntas porque nooo se quieren enteraaar yeee, yeee...

 


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Amanece que no es poco:

"Vamos a luchar contra el fraude laboral." "¡El comunismo, que viene el comunismo!" Pero no viene el comunismo, se va la impunidad. Y se asustan.

El III Barón d'Holbach (Textos escogidos)

 

Bellas tradiciones españolas: "El fantasma de las navidades pasadas..., en noviembre y en Boadilla."

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Mil preguntas desde el extremo centro para entorpecer la tramitación presupuestaria. Cosas de..., "patriotas".

 

Iván Espinosa de los monteros con una pila de folios en las manos, evidencia que la razón de ser de Vox en el Congreso es entorpecer cualquier procedimiento democrático. Qvod erat demonstrandvm.

 

Fotografían a Maroto, senador "popular" por Sotosalbos, intentando leer desde su escaño las anotaciones de la ministra Bellarra. Esta gente, cuando se pone a dar muestras de "elegancia política"...

 

Ya ves tú, decía yo que Maroto no servía para nada en política y resulta que sirve para dar mal ejemplo.

 

De parte de Yolanda Díaz (Unidas PODEMOS), a la patronal, que si no negocias, el acuerdo igual no te resulta satisfactorio. De parte de la patronal a Yolanda Díaz que lo satisfactorio es lo que no interesa al trabajador, no gusta al gobierno y no atrae a los  sindicatos. Vale que los empresarios no lo han dicho exactamente así, pero para el caso...

 

La fiscalía anticorrupción pide que se impute a Esperanza Aguirre por corrupción, tras reducir el número de camas de un hospital público de gestión privada, sin reducir proporcionalmente las asignaciones de fondos para la empresa. Es lo que tiene la salud como negocio y no como servicio, que a la larga da problemas..., de salud y de los otros.

 

En el PP siguen buscando trapos sucios contra Díaz Ayuso. Pero si el principal trapo sucio es que su carrera política vino de la mano de Aguirre... Ah..., claro..., como la carrera política de..., y de..., también de... Bueno, vale, vamos a dejarlo estar.

 

Varios implicados de la trama Gürtel en Boadilla del Monte admiten haber actuado al margen de la legalidad hace mucho tiempo en un Partido Popular muy lejano. Y eso.

 

El "ciudadano" Juan Marín, tras ser grabado diciendo que los presupuestos no son tanto para el interés de los ciudadanos como el interés electoral de su partido, dice que filtrar el comentario es política basura. Puede verse así..., la basura atrae a la basura...

 

Porque decir que hay que hacer lo que conviene al partido antes de lo que conviene a la gente, un poquito basura sí que es...

 

PP y Vox sacan adelante una enmienda a los Presupuestos Generales con el voto de Bildu y la Esquerra que, en esta ocasión, no son golpistas-terroristas-secesionistas-amigos-de-Otegi. Joer, que sutilezas tiene la ultragramática parda...

 

En Movistar+ censuran chistes sobre Vox. Desde luego, quién iba a pensar que unos consejeros de derechas iban a tener mala opinión sobre el humor de izquierdas...

 

Poco a poco se va entendiendo la salida de Movistar+ de Bob Pop, Javier Durán o Andreu Buenafuente. Ahora sólo falta que los partidos conservadores se rasguen las vestiduras y reclamen a Movistar+ libertad de expresión. Eso sí que sería de chiste.

 

Que dice el CIS, que yerran las encuestas. Que dicen las encuestas que yerra el CIS. Y en eso andan.

 

Es que el CIS dice que gana Sánchez y las encuestas de encargo que gana quien las encarga..., perdón Casado. En fin, el rollo de costumbre.

 

Vamos, digo yo que se está generando un estado de opinión sobre los "antivacunas". La cosa viene por dos frentes, por un lado las vacunas tienen una efectividad amplia pero limitada y por otro, los no vacunados constituyen un claro factor de contagio. El debate se dirige a si se puede obligar a una persona a recibir la vacuna o no. Ya se han alzado las primeras voces negando que tal obligación pueda ser constitucional en el país en el que se impuso durante muchos años el servicio militar y en el que es posible llevar al pueblo a la guerra, cosa que casi consiguió un afamado "constitucionalista" hará cosa de veinte años. Es decir, se nos puede mandar a ser carne de cañón, pero no a ponernos una inyección. Pues no parece un razonamiento muy sólido... Por otro lado, la ultraderecha pretende pescar en el caladero de los descontentos con la política sanitaria en general y los contrarios a los avances científicos en particular. No es raro que lo hagan, tanto el miedo como la duda, los prejuicios como las conspiranoias, la irresponsabilidad como la ignorancia, cuando se convierten en votos, cuentan exactamente igual que los otros y se traducen en escaños. Es la grandeza de la democracia, que todos entramos igual y a todos se nos computa por el mismo valor. Ultras aparte, yo soy más de persuadir que de obligar, mejor una buena campaña de información que un pinchazo a las bravas. Alentar antes que imponer. Si no queda otra, siempre se puede recurrir a pasaportes covid y pruebas de contagio, que son más satisfactorias que multar o exigir. Pero con la ultraderecha, empeñada desde el primer día al Gobierno en lugar de combatir la enfermedad, ya veremos lo que acaba sucediendo. Por ahora el debate está en sus comienzos. Así que vayan pensándoselo, porque en poco tiempo va a ser el tema estrella.

 

Las desinformaciones de hoy han sido desfiguradas a partir de Radio Nacional de España, Cadena SER, Público, El Diario y El Huffington Post.

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