Boletín Desinformativo de la Mañana, año X, número 2428
Y es que apropiarse de la bandera es bastante más
fácil que apropiarse de la cultura.
----------------
Amanece que no es poco:
Dice alguien entre el facherío: "Dios es
español." Pero no sé si sabe si es español de Murcia, de Alcafrán; seguro
que del País Vasco no. Quizás sea de Albacete. Ojalá fuera de Buciegas. Ojalá. ¡Ay,
Señor!
El III Barón d'Holbach (Textos escogidos)
Bellas tradiciones españolas: "."
---------------
Hoy no hay más boletín desinformativo que el meme, el
comentario del señor barón d'Holbach y el "vamos, digo yo". La culpa
es del tiempo..., ay, el tiempo..., el tiempo es lo que pasa..., cuando te
quedas dormido y se te hace tarde.
Ya me perdonarán. O, si lo prefieren, decimos que ha
sido culpa de Sánchez y Puigdemont, como en el PP dicen que esos dos tienen la
culpa de todo...
Vamos, digo yo que dicen
que, en España, Rajoy apoya a Milei en Argentina. Y también lo hace Vargas
Llosa. El comentario irónico ya lo hice hace algunos días: si te apoya Vargas
Llosa, pierdes las elecciones, comprobado, cinco veces seguidas, es un don que
tiene el literato, para hundir a los que le atraen políticamente. Si te apoya
Rajoy, tienes muchos números de acabar en la cárcel o, como mínimo, delante de
un juez. Comprobado. Se lo pueden preguntar a no pocos miembros y simpatizantes
del Partido Popular. Es otro don. Bromas aparte, aquí vamos camino de investir
nuevamente a Pedro Sánchez frente a una derecha que no oculta sus agrado hacia
el tal Milei. Es algo que asusta, porque el candidato ultra argentino habla de
cosas peligrosísimas como cerrar el banco central, permitir la compraventa de órganos
y la tenencia de armas, privatizar los servicios públicos o servirse de los
recursos naturales sin otra consideración que no sea la rentabilidad
empresarial. No parece un escenario prometedor, más bien un levantamiento de la
veda ante cualquier exceso que se le pueda pasar por la cabeza, a él o a sus
colaboradores. Su rival, Massa, dicen que no lo ha hecho bien en materia
económica..., pues será verdad..., pero es que no veo yo como se recupera una
economía basada en vender órganos o poder liarse a tiros, por citar los puntos
más, digamos, "coloristas". En cualquier caso los Milei de este mundo
no son el problema. El problema son los que deciden votar a los Milei de este
mundo. No se pueden individualizar, no se pueden analizar uno a uno, pero su
voto se puede contabilizar y abrir, con él, la puerta a la catástrofe. El
pueblo argentino tiene un problema, ahora la duda es si lo va a intentar
solucionar de alguna manera o lo va a agravar votando a alguien dispuesto a comerciar
con los riñones de sus conciudadanos. Suerte, Argentina, la puedes necesitar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario