Boletín desinformativo de una mañana de otoño, año IX, número 1995
Y ahora viene cuando Espinosa de los Monteros dimite y
tal y cual...
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Amanece que no es poco:
"Reprochan al Papa. Por pretender ser cristiano. Para uno que hay."
El III Barón d'Holbach (Textos retorcidos)
Bellas tradiciones españolas: "La derecha siempre
enredada con la pasta. No, no hablo de espaguetis."
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Ah, que no, que como es de derechas, con la sentencia
basta. Paga lo que debe y a continuar exhibiendo "sólidos valores"
por las tribunas de oradores.
Y es que el Tribunal Supremo ha resuelto que lo que
querían cobrar los trabajadores que hicieron la reforma en la casa del ultra,
es la cantidad correcta, mientras que la que pretendía pagar el ultra,
sensiblemente inferior, no.
Así que, puestos ante la disyuntiva de acatar la
sentencia o salir con que el Tribunal Supremo es un tropel de MENAS de la ETA
vendidos a Caracas y los okupas o algo por el estilo, se ve que el ultra
Espinosa de los Monteros va a optar por acatar y pagar.
Lo de dimitir..., que por menos ha caído algún
ministro..., parece que lo tiene en tareas pendientes y ya lo valorará un día
de estos.
No sé qué tienen las derechas en España, que a poco
que rasques, unos te hacen contabilidad creativa, otros no pagan lo que encargan,
otros reparten sobres, o cobran comisiones, o saquean directamente..., en fin,
que es ver un euro y pierden la cabeza.
Siempre a vueltas con el dinero..., y con la moralina
para disfrazarlo.
Y la bandera para envolverlo.
Y el Himno para silenciarlo.
Ah, sí, claro..., y el de la coleta se compró un
chalé..., que lo está pagando mes a mes, no como otros que no parecían
dispuestos a ello...
Pequeña polémica en las matrimoniadas radiofónicas de
García Margallo y Pablo Iglesias. El ex ministro "popular" que se ha
pasado treinta años diciendo que no es posible que Felipe González ignorase que
en su gobierno se había gestado un grupo terrorista de Estado, afirma ahora que
Rajoy no podía saber que en el partido que lideraba se estaban haciendo mangas
y capirotes contables a todos los niveles a lo largo y ancho de España. Son los
niveles "populares" a situaciones similares, conclusiones
divergentes.
Es lo que tiene proclamarse administrador de la
verdad. Y de la patria. Y de los símbolos. Y de los valores... Que luego la
gente te lo vota como si se lo creyese, y puede que incluso algunos se lo
crean.
Ya se alzan las primeras voces reivindicando la figura
de Juan Carlos I, tras cerrarse la investigación de la fiscalía suiza sobre las
comisiones del AVE a La Meca. Y es que, en España hay personas tan encantadas
de ser ciudadanos como deseosas de ser súbditos.
Es una especie de servilismo patológico que nos aqueja
desde hace doscientos años. Que a ver si algún laboratorio inventa algo y nos
dejamos de añorar "las caenas".
En fin, que creíamos que parte de la injustificable
fortuna de Juan Carlos I procedía del AVE a La Meca, pero resulta que no, que
procede de algún otro sitio y, hasta que se descubra, hay que pensar que fue un
regalo entre amigos. Vienen majas las ruedas de molino esta temporada...
La fundación Citizengo, dependiente del grupo ultra
Hazteoír para el que organiza campañas, no presenta sus cuentas a la
Administració desde hace seis años. Pero, tranquilos que no lo van a denunciar
ni Vox, ni los abogados cristianos esos.
Tuit del día: "Al Dioni le pasó lo que a
Deliveroo: tuvo que salir del país porque las leyes que querían aplicarle
convertían en inviable la rentabilidad de su negocio." -Mauro
Entrialgo-
Vamos, digo yo que ayer hubo cierta polémica sobre si
Mariano Rajoy había mentido o no en la comisión del Congreso de los Diputados.
Verán, cuando uno declara ante un juez en calidad de imputado, tiene derecho a
mentir. Eso es porque se da por sentado que, ante una acusación, el investigado
va a intentar quitársela de encima por todos los medios, de ahí que la ley no
se tome a mal esa actitud por lo demás muy humana. Ante el Congreso de los
Diputados, el compareciente tiene, en cambio, obligación de decir la verdad, como
si fuese un testigo o un perito en un juicio. En estas situaciones, ya no vale
mentir. Y cabe pensar que Rajoy mintió cuando negó la existencia de la llamada
Caja B del Partido Popular, siendo que hay sentencias en las que no sólo se
considera probada la realidad de una contabilidad paralela, sino que, además,
se establece que el partido se lucró de ella de un modo u otro. Por tanto,
Rajoy ha mentido. Bueno, podría verse así. La Caja B está demostrada, él dice
que no, ergo miente. Pero he ahí el matiz, el triste matiz, que mentir es
declarar algo diferente de lo que se sabe o piensa, con la finalidad de
engañar. Y, díganme ustedes, en esos parámetros ¿mintió don Mariano o
simplemente se puso en ridículo haciendo una afirmación equiparable a decir que
es de noche a mediodía? Ese es el problema y la virtud del Partido Popular, que
ya no mienten para engañar, que no hacen sino negar la evidencia, ennegrecer lo
blanco y blanquear lo negro, pero de una manera digamos automática o incluso
compulsiva. Y esa es la virtud del Partido Popular, que a la inmensa mayoría de
sus votantes, les da igual si lo que afirman o niegan sus líderes se
corresponde con la realidad. De una extraña mezcla de principios, lealtades,
miedos al otro y conveniencias, surge una reiterada disciplina de voto. ¿Mintió
Rajoy?, como si eso importara en el PP...
Las desinformaciones de hoy han sido desfiguradas a
partir de Radio Nacional de España, Cadena SER, Público, El Diario, InfoLibre y
El Huffington Post.
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