Boletín Desinformativo de la Mañana, año X, número 2233

 

Sólo porque Abascal y Bolsonaro son muy amigos, ya van por ahí los rojos diciendo que Abascal y Bolsonaro son muy amigos.

 

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Amanece que no es poco:

 

"Ohhhhh, mi Dios ¿qué va a ser esto? ¡Un Real Madrid sin españoles! ¡Sacrilegio! ¡Sacrilegio! Si fuésemos más tontos nos cagaríamos en el plato."

 

El III Barón d'Holbach (Textos escogidos)

 

Bellas tradiciones españolas: "El golpe de enero. Perdón, la cuesta de enero."

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En Brasil han pasado del "menos samba e mais trabalhar" al "menos samba e mais sublevar"..., el epicureísmo anda de capa caída.

 

En cualquier caso, ha sido mucho más desenfadado que en Bolivia, donde los mismos dieron el golpe..., a golpe de Biblia.

 

Críticas al PP por dar vergüenza ajena con el comportamiento de Cuca Gamarra..., pues esperen ustedes que aún no ha terminado el congreso de Ciudadanos...

 

Sí, bueno, es que para la señora Gamarra, ante el golpe en Brasil, lo primero y principal no fue posicionarse del lado de la democracia sino criticar al gobierno democrático de su propio país.

 

Son las prioridades..., sus prioridades..., las únicas prioridades que siempre han tenido.

 

Cierto es que hubo en España un movimiento "Rodea el Congreso" que trató de, como indica su nombre, manifestarse rodeando el Congreso de los Diputados..., si bien no es lo mismo que asaltar las sedes de los tres Poderes, aunque parece que toca hacer como si fuese lo mismo.

 

Claro que yo, a los únicos que recuerdo haber visto masivamente en la puerta del Congreso es a los sindicatos policiales en una manifestación que montaron en la Carrera de San Jerónimo y por la que ningún miembro de las derechas se sintió molesto.

 

Aquí no es lo que se hace, sino quién lo hace. Si son los suyos: santo y bueno.

 

Y qué fijación con envolverse en las banderas..., con el calor que hace allí además...

 

Se ha echado de menos un golpista luciendo cuernos..., aunque fuese de reno de Papa Nöel, que teniendo tan recientes las Navidades...

 

Lo de Brasil..., igual no son fascista a quienes les moleste la democracia, igual es sólo que fascistas a quienes les molesta que no gane Bolsonaro. Que viene a ser lo mismo, pero dicho así parece otra cosa...

 

Macarena Olona, primera ultra en condenar el golpe de estado de Brasil. Y se extrañaba de que le pusiesen zancadillas en Vox.

 

Que no me fío políticamente ni un pelo de esa señora, pero acaba de adelantar a todos sus es amigos.

 

Oigo en la radio al ultra señor Buxadé condenando la violencia, toda la violencia. Vale..., pero..., ¿no se suponía, según las derechas, que condenar la violencia, toda la violencia, resultaba intolerable porque era lo que decían en tiempos los de Herri Batasuna?

 

Lejos de mí trazar equiparaciones, ni paralelismos. Es sólo que me acuerdo.

 

De parte del presidente saliente del Tribunal Constitucional que de qué van a estar politizadas las instituciones... Angelico...

 

Gente preocupada por la nacionalidad de los jugadores del Real Madrid. Y no sé qué de una sociedad puntera y avanzada...

 

Núñez Feijóo recupera a Borja Semper..., se ve que lo de la moderación se les había caído de la agenda y necesitan algún moderado de verdad...

 

Vamos, digo yo que andan discutiendo si lo de Brasil, en España sería rebelión o desórdenes como jura..., y más bien perjura, la "popular" señora Gamarra con esa mentirijilla suya que difundieron ayer todos los medios sin especificar que se trataba de una mentirijilla. Es un debate ocioso, salvo que a Bolsonaro o quien esté detrás de la algarada se le ocurriese pedirnos asilo, cosa más bien poco probable. Dejando a un lado que lo primero que hizo el PP ante un ataque fascista a la democracia fue intentar mentir para ir haciendo campaña, lo importante es que parece que la situación se está reconduciendo. Leo por ahí que hay mil quinientos imbéciles detenidos. A ver, en el periódico no pone que sean imbéciles, por supuesto, pero tienen que serlo para hacer lo que han hecho mientras su líder político (y ya veremos si intelecual...) anda desmarcado por esos mundos. Lo que importa es que Brasil continúa siendo una democracia y que al fascismo no le ha salido bien la algarada. Ahora, mientras aquí las derechas insisten en sus gansadas, les toca ahora a las autoridades brasileñas la compleja tarea de unir a la sociedad en un proyecto común que ilusione y no deje espacio a las ensoñaciones violentas del sectarismo ultra. Si lo hacen, entra dentro de lo posible que se pueda superar la algarada y su triste mensaje de odio. En sus manos está.

 

Las desinformaciones de hoy han sido desfiguradas a partir de Radio Nacional de España, Cadena SER, Público, El Diario y El Huffington Post.