Boletín desinformativo de una mañana de otoño, año IX, número 1996
El Presidente del PP en Zaragoza protagoniza una
patochada, porque como parece ser ese el medio para promocionarse en Génova.
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Amanece que no es poco:
"Papá pitufo Noel. Es que se ve que según quien gobierne en cada sitio
así se trajea al Santa Claus. Azul en Madrid. Los renos quizás en verde. El
naranja... tontería es pensar nada. En fin, cosas que no importan salvo si
molestan a la derecha."
El III Barón d'Holbach (Textos escogidos)
Bellas tradiciones españolas: "Pronunciar un
discurso en el Congreso y que sólo te falte escupir un chicle."
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Que no es broma, que en el PP a base de anécdotas
chuscas es como se llega a las alturas. Y si no, ahí tienen los currículos de
Casado, Ayuso, García Egea, Maroto...
En fin, a mí eso de los políticos visitando el
desastre siempre me pareció innecesario, y en eso comprendía a Rajoy, que no
visitaba casi ninguno en comparación con Sánchez.
Claro que, por no ir, se perdió las botas que regalan
si vas.
Aunque no sé y si el presidente del PP de Zaragoza,
señor Celma, le hubiese hecho el mismo regalo a don Mariano.
No es cierto que el "popular" señor Celma
llevase naúticos o mocasines, claro que equipado para pisar barro, lo que se
dice pisar barro tampoco iba. Y es que no es cosa de qué calzado llevaba sino
de qué nivel político exhibía..., que no estuvo muy alto la verdad.
Ahora que nivel, lo que se dice nivel, Pablo Casado
con una incisiva oratoria forense a la que sólo se le echo ayer en falta un
"caca, culo pedo, pis".
¿Saben ustedes Castelar, Salmerón, Cánovas, Azaña,
Sagasta o Pi y Margall?, pues..., básicamente..., nada que ver.
Todo para, en lugar de la simple aplicación de la
normativa en el caso del alumno del colegio de Canet, rebozar excesos sobre el
artículo 155 o los despliegues militares de Kennedy..., sin ser Kennedy y sin
tener motivo para desplegar otra cosa que una gramática de taberna.
Ayer, Yolanda Díaz (Unidas PODEMOS), en lugar del
"dato", proporcionó a García Egea (PP) que seguía empestillado con la
visita al Papa, el versículo sobre el camello que pasa por el ojo de la aguja
antes que un rico por la puerta del cielo. Y tan descolocado se quedó, que la
llamo Presidenta.
Si cuando yo digo que la de la derecha, más que un
compendio de valores es una simple suma de miedos, de temores, a duras penas
disimulados...
Eso que tu partido llama comunista al Papa y te acaban
recordando que precisamente a Cristo, los ricos, caerle bien, lo que se dice
caerle bien... Y siendo el PP un partido de esos al que votan los pobres para
sostener los intereses de los ricos, quizás los comentarios teológicos no
terminen de encajarles del todo bien.
Si un juez dice que le has pegado una patada a un
policía, pierdes el escaño. Pero si un juez dice que no pagas los encargos que
haces a unos trabajadores, entonces ya..., tal.
Por supuesto, son situaciones distintas...,
infracciones diferentes..., procesos dispares..., niveles desiguales.
Que en Twitter a Espinosa hasta le han puesto rastas,
por aquello de trazar paralelismos..., la verdad es que no le terminan de
quedar bien..., y, total, a él no le van a dejar sin escaño al otro.
La España que madruga..., para no pagar al electricista,
al pintor o al albañil.
Que no es raro si consideramos que Vox lo lidera un
representante de la España Que No Cotiza.
Pero bueno, son cosas de ultras pijos de extremo clasismo.
Vamos, digo yo que ayer por la tarde, tras finalizar
su jornada laboral, falleció el fiscal Juan Ignacio Campos, encargado de la
investigación a Juan Carlos I. Descanse en paz. Al parecer, padecía una larga
enfermedad que no le privó de ejercer sus funciones hasta el último día de su
vida. Lejos de mí las teorías conspiratorias, salvo para hacer alguna que otra
ironía en estos boletines desinformativos. Pero..., leñe..., es que hay que ver
cómo cae la gente. Entre el Partido Popular y la Casa Real, se suman ya no
pocos "actores" fuera de escena. Ya les digo que, a buen seguro, todo
tiene una explicación sencilla y sin elementos extraños. El caso es que, aun sin
elementos extraños, no deja de resultar eso, extraño, el ritmo de
fallecimientos en las investigaciones. Justo es añadir que los
"populares" están metidos en una cantidad más que notable de
corruptelas, sinvergonzonerías, fraudes o saqueos, y que en la familia esa tan
Real como irreal, pasa tres cuartas de lo mismo. Cuando hay tanta gente es
razonable que también muera gente. Que uno se suicide, que se manifiesten
enfermedades, largas o repentinas, que alguien pare sus días en la soledad de
un hotel. Sí, seguro que es normal. Lo contrario sería de película americana en
la que un grupo policial recibe carta blanca para hacer justicia, o impedirla,
actuando sin control por encima del bien y del mal. Y eso aquí no sucede.
Bueno, últimamente ya empiezan a abundar en España las series en que los
responsables del orden no responden ante nadie. Pero son series. Supongo.
Las desinformaciones de hoy han sido desfiguradas a
partir de Radio Nacional de España, Cadena SER, Público, El Diario y El
Huffington Post.
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